El 47 por ciento de los españoles "suspenden" en hidratación. Así lo recoge el Barómetro de la Hidratación y la Ingesta de Agua 2008 (BAHIA) de la Sociedad Española de Nefrología (SEN).
Según el mismo estudio, la mayoría de los españoles prefieren el agua del grifo para hidratarse (60,7%), seguida de los zumos o refrescos (46%) y el agua mineral (45%) y suelen beber más en casa (99%) que en el trabajo (67%) o que en bares o restaurantes (20%).
La dieta de los españoles contiene un exceso de grasas saturadas. Así quedó de manifiesto durante el 30º Congreso Nacional de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (Semergen) celebrado recientemente en Valencia.
Seguir una alimentación cardiosaludable implica disminuir el consumo de grasas saturadas y trans. Éstas deben sustituirse por las grasas mono o poliinsaturadas que componen el aceite de oliva, los frutos secos, los pescados azules o la margarina.